La vida está para vivirla en plenitud, para disfrutarla de corazón. No te encierres en tus sufrimientos, no vivas la vida enfocándote en el dolor y lo negativo. La vida es y será como tú la quieras, ¡disfrútalo, vive con alegría en tu corazón!
domingo, 8 de junio de 2014
40 buenas razones para ser una mujer de 40 (Buenisimo y cierto.)
BÉS LO QUE QUIERÉS
2) SABES LO QUE NO QUIERÉS
3) EL QUE DIRÁN ES UN PROBLEMA DE LOS DEMÁS
4) SABÉS CON QUIENES QUIERÉS ESTAR
5) SABÉS CON QUIENES NO QUIERÉS ESTAR
6) APRENDÉS A VALORAR LO QUE TIENÉS
7) ESTÁS MEJOR PLANTADA
8) TIENÉS MENOS EXPECTATIVAS
9) TE AMARGÁS MENOS
10) LOS PROBLEMAS SON PROBLEMAS Y LAS PAVADAS, PAVADAS
11) LA VIDA ES HOY
12) APRENDÉS A SER MENOS INDISCRIMINADA
13) APRENDÉS A REIRTE DE VOS MISMA
14) PIERDÉS EL MIEDO AL RIDÍCULO
15) PIERDÉS EL MIEDO A LA SOLEDAD
16) GANÁS SEGURIDAD
17) TE SENTÍS BELLA
18) EMPIEZÁS A INCORPORAR PALABRAS COMO PRESBICIA
19) TE DAN RISA LAS COSAS POR LAS QUE ANTES TE HACIAS UN MUNDO
20) EL RIDíCULO DEJA DE SER UN CUCO
21) LOS AMIGOS SON MÁS AMIGOS QUE ANTES
22) LOS PSEUDOAMIGOS QUEDAN EN EVIDENCIA
23) LAS DIETAS DEJAN DE SER UNA OBSESIÓN
24) VIVISTE MUCHO Y TE QUEDA MUCHO
25) TENÉS HISTORIAS PARA CONTAR
26) UNA BUENA CONVERSACIÓN IMPORTA MAS QUE EL SEXO
27) TE IMPORTA MAS EL CEREBRO QUE LA FACHA
28) LA PAREJA ES MÁS DESEO QUE OBLIGACIÓN
29) ENAMORÁS POR TU DESPARPAJO
30) LA CELULITIS PASA A SER AMIGA
31) HOY ES HOY
32) LOS EX SON CADA VEZ MÁS Y TE IMPORTAN CADA VEZ MENOS
33) EL QUE DIRÁN TE DA IGUAL
34) LA MIRADA DE LOS OTROS ES AJENA, COMO LAS VAQUITAS
35) TENÉS MÁS TOLERANCIA A LA FRUSTRACION
36) TE ALEJÁS DE LOS QUE TE TIRAN PARA ATRÁS
37) TE VUELVÉS MENOS DEMANDANTE
38) NO TENES MÁS GANAS DE QUE TE ROMPAN
39) TE DAS CUENTA QUE DESPUES DE LOS 30 TODO EL MUNDO TIENE PROBLEMAS
40) ESTÁS MÁS VIVA QUE NUNCA
Cumplir 40 años lleva implícito que no hay tiempo para perder en pavadas, que se está cerca de la mitad de la vida y que la eternidad es un cuento. Que es casi una obligación moral disfrutar cada momento. Se trata ahora de no tomar compromisos vanos ni quedar bien con gente que a uno no le importa demasiado. Aprender a disociar las expectativas ajenas y las proyecciones familiares, de amigos, de los propios deseos. En definitiva, hacer carne lo que uno quiere y desechar, si no sirve, lo que otros quieren para nosotros.
El desafío es rico: empiezan experiencias más intensas. Algunos hablan de una segunda adolescencia. A los 40 suele aparecer un sentimiento inmenso y notable: la aceptación. Una se conoce ya más que nadie, ya sabe quién es y nadie va a venir a contarle un cuento chino. Terminó la búsqueda donde no hay y, si aún no terminó, hay que decidirse a pagar un buen psicólogo. No se trata de conformarse con quien se es, sino de aprender qué se quiere y cómo se lo quiere.
Aparece esa gloriosa e impune sensación de poder decirle a la gente lo primero que viene a la cabeza (guardando las formas, claro, para no andar ofendiendo de gusto) Hay una toma de conciencia acerca de que lo que se guarda y no se expulsa detona en el cuerpo en forma de enfermedades.
Resumiendo: no hay más ganas de perder el tiempo en pavadas ni escuchando pavadas. Es la edad de la liberación.
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